Seis personas murieron en un fallido rescate adentro de un pozo de cloacas de la localidad de Blaquier, en el noroeste bonaerense, cuando un operario gasista se desvaneció por inhalar un gas toxico y otros cinco vecinos bajaron sin protección para intentar rescatarlo.
La tragedia ocurrió en la tarde del viernes, cerca de las 18:30. Ricardo Bottega, de 60 años, bombista del pueblo, había sido contratado por la municipalidad de Florentino Ameghino para un trabajo en un sitio conocido como «El cigarro».
Bottega, de enorme experiencia y reconocido en la zona, habría entrado sin protección a la cámara, ubicada unos doce metros bajo tierra. Allí habría inhalado un gas que fue letal.
Según el diario local Semanario de Junín, la hipótesis preliminar indica que el pozo (parte del sistema de cloacas de Blaquier) contenía unos 70 centímetros de aguas servidas, por lo que los gases producidos por el líquido cloacal y acumulados en el lugar, sumados al encierro, podrían haber sido la causa de la tragedia.
Ricardo Bottega era un reconocido bombista y acordeonista de Ameghino. Foto: FacebookCreen que podría tratarse de gas butano, pero fuentes judiciales citadas por los medios locales afirmaron que está en investigación qué pasó exactamente.
En un momento, Bottega comenzó descomponerse y a pedir ayuda. No llegó a salir a la superficie. Estaba acompañado por otros dos colaboradores, que bajaron a ayudarlo, también sin máscaras. Allí comenzaron a ingresar distintos vecinos, a medida que los que entraban a rescatar no salían. Como el operario no salía, otros cinco bajaron a ayudarlo.
Tragedia en Blaquier: quiénes son las víctimas
Las otras víctimas son Carlos Reinger, bombero voluntario de 39 años; Alejandro Centeno, de 36 años; Mateo Pellegrino, bombero voluntario de 27 años; Juan Ramón Sanchez, de 50; y Nicolás Sánchez, bombero voluntario de 28 e hijo de Juan Ramón. Todos los cuerpos quedaron boca abajo y demandaron un esfuerzo enorme para rescatarlos.
Los bomberos voluntarios Mauricio Héctor Torres y Mauricio Guerrero, que participaron también en las tareas de rescate, fueron internados aunque se encontraban fuera de peligro y evolucionaban favorablemente.
Salvo Bottega, que era oriundo de Ameghino, las otras cinco víctimas eran de Blaquier, una localidad de poco más de 600 habitantes. La cabecera del partido, Ameghino, tiene 7 mil habitantes.
Cerca del mediodía de este sábado, la municipalidad de Ameghino informó que las autopsias realizadas por la Oficial Ayudante, Marianela Di Santos, de la policía científica (departamento judicial de Junín) sobre los seis fallecidos señalan como causales de muerte la “asfixia mecánica por broncoaspiración”.
En tanto, precisaron que hay otros dos bomberos que rescataron los cuerpos de las víctimas que quedaron en observación preventiva en el Hospital Municipal “Dr. Felipe A. Pelaez”. Se encuentran estables y próximos al alta, según el parte médico oficial.
Luego de la tragedia, la intendencia estableció tres días de duelo.»Todo el pueblo de Florentino Ameghino está inmerso en un profundo desconsuelo, por esta irremediable perdida», escribieron en un comunicado publicado en Facebook. En los comentarios, los vecinos dejaban las despedidas y sus condolencias.
Según explicó Nahuel Mittelbach, intendente de Ameghino, el pozo era una obra nueva. Bottega había bajado ese mismo día por la mañana a ese lugar. «No teníamos personal tecnico por eso lo contratamos siempre a él. Se dedicó toda la vida a esto», contó a TN.
De acuerdo a su descripción, el acceso es totalmente cercado. «Entran solamente los que hacen trabajos, es un pozo de bombeo y había que hacer una reparación. Tiene unas tapas pesadas, se desciende por escalera. Hay una habitación con todas la parte eléctrica y el pozo de bombeo de las cloacas», narró.
Cuando el gasista no pudo salir, los vecinos comenzaron a ayudar antes que lleguen los bomberos. «Es un pueblo chico, todo el mundo quiso salir al rescate y empezar a ayudar. Las víctimas salieron casi sin signos vitales», dijo, y remarcó que los bomberos entraron con equipamientos pero igual sufrieron por los gases.