El empate agónico de Independiente fue de Mauricio Isla, pero un gran responsable de que se diera sin dudas fue Ignacio Maestro Puch, quien le dio la asistencia al chileno de cabeza a pesar de que estaba lesionado en uno de sus gemelos. De hecho, estaba siendo atendido por los médicos del Rojo y el tucumano pidió volver al campo para la jugada de córner que terminó en el gol del 1-1 definitivo.
“Quiero puntear la pelota y se me acalambró el gemelo. No había forma de que se aflojara. Cuando aflojó, los médicos no querían que yo volviera a entrar y les dije que iba a entrar igual. La verdad es que no podía pisar bien. Estoy contento por al menos haberlo podido empatar y por haber ayudado al equipo siendo parte de la jugada”, contó Maestro Puch con la igualdad consumada, que no le sirve tanto a un Independiente que necesitaba los tres puntos para soñar con la clasificación a los playoffs de la Copa de la Liga.
El destino parecía estar marcado en el partido para este atacante ante su ex club. Maestro Puch estuvo tirado unos minutos tras una situación de peligro. Quedó en el área chica y el local estaba apurado ya que necesitaba al menos empatar. De hecho, el capitán Iván Marcone se acercó a apurarlo a él y a los médicos para que lo siguieran atendiendo afuera así se reanudaba el juego: «Levantate y salí, dale«, se escuchó a Marcone que hasta lo sacó a la rastra a un costado del arco.
Maestro Puch estaba muy dolorido, pero Tevez había agotado los cambios y decidió ingresar igual. En el córner de Gabriel Neves metió el cabezazo para que Isla la empujara a la igualdad, también de cabeza.
“Seguimos en carrera. Quedan dos finales y hay que ganarlas. Hay que luchar hasta el final. La idea era sumar de a tres pero no se pudo. Este club exige y hay que darle lo que se merece. Tenemos una semana larga y hay que aprovecharla a full para sumar de a tres contra Banfield y después pensar en Talleres que será acá en casa”, analizó el tucumano que le tocó estar desde el arranque ayer.
Tenía que suceder. Se aguantó el dolor, decidió volver al campo y tuvo su recompensa.
