Aerolíneas Argentinas seguirá en manos del Estado, así como el Correo Argentino y los medios públicos, luego de que el Gobierno aceptó quitar la privatización de estas empresas del proyecto de Ley Bases.
De esa manera, la línea aérea estatal seguirá exigiendo al Tesoro los fondos necesarios para sostener su déficit crónico.
Según datos oficiales, el año pasado Aerolíneas tuvo una pérdida operativa equivalente a casi 400 millones de dólares, pese a lo cual casi no le pidió fondos al Tesoro para continuar funcionando.
«La compañía casi no recibió transferencias del Estado durante 2023 porque, con la venta de pasajes en el exterior y en dólares billete, Aerolíneas transformaba esos ingresos en moneda extranjera a pesos al tipo de cambio MEP mientras que liquidaba gastos en dólares al tipo de cambio oficial, con una brecha de más del 100%», señalaron fuentes oficiales a fines de mayo, cuando fue aprobado el balance 2023 de la línea aérea.
El visto bueno para obtener ese subsidio encubierto aplica no sólo para Aerolíneas sino para las otras líneas aéreas con aviones de matrícula local y tripulaciones locales.
La diferencia es que, en el caso de líneas como Flybondi o JetSmart Argentina, los vuelos internacionales todavía no tienen un peso decisivo dentro de sus ventas totales. En el caso de Aerolíneas, en cambio, los vuelos internacionales representan casi la mitad de sus ingresos.
Según un informe de la Secretaría de Hacienda, durante 2023 Aerolíneas facturó casi 610.000 millones de pesos por venta de tickets de los cuales poco menos de la mitad ($248.000 millones) correspondieron a vuelos internacionales que se facturan en dólares.
«Durante 2023 Aerolíneas recibió un subsidio indirecto producto de la brecha cambiaria de más de 380 millones de dólares», señalaron fuentes oficiales.
Aquel esquema funcionó gracias a una brecha cambiaria entre el dólar oficial y el dólar MEP que fue superior al 100% durante 2023. Pero tras la devaluación del 10 de diciembre la brecha se achicó: aun con el repunte de la cotización del dólar blue de las últimas semanas, la brecha entre el dólar oficial mayorista y el MEP oscila entre 44% y 45%.
En ese contexto, en Aerolíneas ahora están dando una nueva vuelta de tuerca para aprovechar los resquicios generados por el cepo cambiario. Está ofreciendo a sus clientes pagar a través de su oficina en Uruguay. Con esa modalidad, buscan estimular la compra de pasajes internacionales desde Argentina pero facturados en el exterior, de modo de contar con una mayor cantidad de dólares que luego podrán ser liquidados a la cotización MEP.
El esquema es beneficioso tanto para Aerolíneas como para los pasajeros, a expensas del Fisco. Para el pasajero, representa la posibilidad de evitar el pago de la gravosa carga tributaria del impuesto PAIS y la percepción de la AFIP, que terminan duplicando la tarifa.
No hace falta ser un entendido para utilizar esta modalidad. La propia Aerolíneas se lo explica de manera didáctica a sus clientes, desde su página web:
«Únicamente podrás abonar con Tarjeta de Crédito. El cobro se verá reflejado en el resumen de tu tarjeta de crédito en dólares, de esta manera al importe del ticket no se le sumará el impuesto PAIS ni la percepción RG de AFIP».
Y le agrega una especie de «manual de procedimiento» para el día de pagar la cuenta y evitar los impuestos que cobra el mismo Estado del cual Aerolíneas forma parte.
«Por ejemplo, en la mayoría de los bancos si estás adherido al débito automático del cobro de tu resumen de tarjeta de crédito y no realizas el «stop debit» con la antelación suficiente, el banco podría debitarte automáticamente el pago en pesos y cobrarte los impuestos mencionados».
Según el ex gerente de Aerolíneas y consultor aeronáutico Carlos Vázquez, esta nueva modalidad le generará a la línea aérea un subsidio por aproximadamente la mitad de sus pérdidas.
«Con pérdidas operativas de alrededor de 400 millones de dólares por año, es posible que este subsidio encubierto, potenciado ahora por la posibilidad legal de vender pasajes emitidos en Argentina pero facturados en Uruguay, Aerolíneas termine necesitando no más de 100 o 200 millones de dólares en subsidios a lo largo de 2024″, dijo Vázquez.
Hasta el momento, desde el ministerio de Economía no han girado fondos para la empresa, que se viene financiando con la venta de pasajes a pagar en 12 cuotas fijas, además del «rulo» que le habilita el cepo.
Fuentes del sector señalaron que Aerolíneas ya negoció el retiro voluntario de 250 empleados y la jubilación anticipada de un número no determinado de empleados de entre 61 y 64 años. Pero desde el ministerio de Economía no fueron girados los fondos solicitados para hacer frente a esas obligaciones. «Seguimos esperando», dijeron fuentes cercanas al titular de la compañía, Fabián Lombardo.
