En medio del escándalo por los audios que revelan un presunto cobro de coimas en el Gobierno, el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, aprovechó su habitual informe de gestión ante la Cámara de Diputados para tratar de empezar a manejar el caso con un contraataque que busca quitarle legitimidad a la ofensiva de la oposición y ciudar la campaña electoral del presidente Javier Milei.
“No se va a negar a responder a nada”, anticiparon fuentes de Casa Rosada a iProfesional poco antes de la sesión informativa cuya fecha fue acordada antes de que se filtraran las grabaciones atribuidas a Diego Spagnuolo, ex titular de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). Pero ya antes de empezar a responder, el jefe de Gabinete salió al ataque: “Resulta indignante que ahora se disfracen de escoltas de la moral”, fue el primer dardo que lanzó.
El funcionario se expresó así al mismo tiempo que criticó los resultados económicos de la gestión kirchnerista anterior. Todo dentro del mismo plan: denunciar la filtración de los “supuestos audios” -según los definió- como “una operación política” que será aclarada en la Justicia.
Minutos antes de que iniciara su informe, los diputados de La Libertad Avanza el oficialismo ya perfiló cuál sería el clima de la sesión al destacar la presentación de Francos en medio del escándalo cuando “antes los jefes de gabinete nunca se presentaban”.
No obstante, el “timming” de la convocatoria a la sesión -que se espera que dure alrededor de seis horas– igualmente fue extraño, porque el presidente de la Cámara baja, Martín Menem, confirmó la fecha justo en medio de la vorágine política en la que quedó inmerso el gobierno de Javier Milei a pesar de que nada les impedía demorarlo.
Escándalo de los audios: la estrategia de Guillermo Francos en Diputados
Si bien Milei evitó hasta ahora hablar del caso y el propio Francos adelantó que esperarán a lo que determine la Justicia porque “lo que diga Spagnuolo tendrá que probarse en los hechos”, el detalle de la convocatoria evidenció el interés del Gobierno por tratar de contener el impacto político real del escándalo.
En el Congreso la oposición impulsa citaciones y pedidos de interpelación tanto para el jefe de Gabinete como para el ministro de Salud, Mario Lugones, y la secretaria general de Presidencia, Karina Milei, la más apuntada, entre otros funcionarios.
Al respecto, Francos llegó a Diputados decidido a responder las preguntas que le hagan (y que pueda contestar) sobre el tema. Para el oficialismo, con esto “no tiene sentido hacer una interpelación”. Ahí está la clave de la importancia estratégica que tiene esta sesión informativa para el Gobierno.
Y es que el jefe de Gabinete está obligado por la Constitución a dar un informe mensual sobre la marcha del gobierno en ambas Cámaras. El de este miércoles es el tercero que brinda en Diputados y el quinto desde que asumió el cargo el año pasado. No obstante, le presenta una oportunidad para empezar a lidiar con el caso en el ambiente más adverso para Milei y en medio de la campaña electoral.
De hecho, en varios tramos de su alocución Francos buscó marcar un contraste con las gestiones anteriores del kirchnerismo, con quien Milei pretende polarizar las elecciones e incluso se mostró firme cuando la sesión se descontroló entre gritos y preguntas filosas de la ex libertaria Marcela Pagano. “Yo no me voy a ir así que pueden discutir todo lo que quieran”, sentenció.
El contraataque del Gobierno: qué dijo el jefe de Gabinete en su exposición inicial
Con más de 1.300 preguntas para responder, que la oposición envió por escrito antes de que explotara el escándalo, Francos no empezó su informe como siempre. En esta ocasión, fue directamente al ataque con críticas a los resultados económicos de la gestión del kirchnerismo y también a las leyes que la oposición impulsó en los últimos meses a contramano del plan económico de Milei.
“Hace una semana, en este recinto, al igual que en el Senado, vimos cómo gran parte de la oposición puso en cuestionamiento el proyecto económico del Gobierno”, empezó el funcionario y señaló que muchos de esos sectores son “los mismos” que dejaron al país “al borde del abismo en 2023, con la hiperinflación a la vuelta de la esquina y el 57% de los argentinos hundidos en la pobreza”.
Francos apuntó que quienes gobernaron en el último tiempo acumularon “un promedio de déficit financiero anual en el orden del 5% del PBI” que, multiplicado por el promedio del PBI de los últimos 15 años, da “un estimado de 450.000 millones de dólares”.
“¿Qué hicieron con ese dinero? ¿A dónde fue a parar?”, lanzó el jefe de Gabinete y agregó: “Apenas con el 2% de ese monto alcanzaría para reconstruir los 40.198 kilómetros de rutas que comprendía Vialidad Nacional; o para darle un bono a cada jubilado de 56.000 dólares por única vez, o pagarle durante 15 años 400.000 pesos extra todos los meses. Más que duplicar la jubilación mínima”.
¿Cómo fue el cruce de Francos con la oposición por el escándalo de los audios?
Poco después de señalar que “resulta indignante que ahora se disfracen de escoltas de la moral” y de hacer una defensa de los resultados económicos y financieros del Gobierno (entre los que destacó haber “sacado a 12 millones de personas de la pobreza”), Francos se refirió específicamente al caso de la ANDIS.
El jefe de Gabinete aseguró que “se orquestó una operación política divulgando unos supuestos audios” del ex titular del organismo y disparó que “tanto la aprobación de leyes que demandan recursos que quiebran el equilibrio fiscal” como “la difamación de funcionarios” son parte “de un mismo patrón: el accionar de un pequeño grupo de personas que, en esta nueva Argentina, ya no tienen lugar”.
En la misma línea, Francos ratificó que el Gobierno espera que la Justicia avance con la investigación y buscó marcar otra vez un contraste con gestiones anteriores. “Una vez más, responderemos ante todas estas maniobras con transparencia y respetando la división de poderes, cosas que no se han hecho en otras oportunidades de la historia reciente de los argentinos”, apuntó.
Tras poner de relieve la remoción de Spagnuolo de la ANDIS y la intervención del organismo “realizar una profunda auditoría” con énfasis “en el sistema de compras y contrataciones”, Francos volvió a tratar de encapsular el caso en la campaña electoral con la mira en la oposición kirchnerista.
“No nos dejemos engañar. El modus operandi populista, que aparece con más fuerza cuando se acercan las elecciones, y que esconde el deseo de conservar privilegios detrás de fines loables, es una práctica que estamos desmantelando y de no hacerlo nos llevaría a la quiebra nacional”, afirmó en ese sentido.