El científico británico Peter Higgs, ganador del Premio Nobel de Física en 2013 por sus trabajos teóricos sobre partículas elementales, consideradas la clave de la estructura de la materia, murió el lunes a los 94 años, anunció este martes la Universidad de Edimburgo.
«Murió apaciblemente en su domicilio el lunes 8 de abril después de una corta enfermedad», indicó la universidad en un comunicado, y agregó que su familia «ha pedido que tanto los medios de comunicación como los ciudadanos respeten su privacidad en estos momentos».
El físico fue reconocido por la teoría del «Bosón de Higgs», cuya demostración práctica, casi medio siglo después, le valió el Nobel. Higgs revolucionó la física moderna al descubrir esa partícula subatómica denominada «partícula de Dios».
Durante mucho tiempo, el nombre de Peter Higgs no fue conocido más allá del ámbito de la física. Ya en 1964 había predicho la existencia de una partícula elemental decisiva, conocida como el «bosón de Higgs». El bosón es clave en la explicación de cómo ciertas partículas elementales obtienen su masa y permite asomarse a la observación de lo que ocurrió inmediatamente después del Big Bang.
Casi al mismo tiempo otros físicos postularon lo mismo. Pero tuvieron que esperar unos 50 años hasta que se logró la prueba de su hipótesis. Fue en 2012, cuando se confirmó que sus colegas del Laboratorio Europeo de Física de Partículas (CERN) en Ginebra (la llamada «Máquina de Dios) habían probado la existencia de una partícula con las características predichas por el británico.
El «bosón de Higgs» es considerado uno de los descubrimientos más importantes del último siglo. Se trataba de la pieza faltante del rompecabezas del Modelo Estándar de la física de partículas, que explica el funcionamiento del Universo y describe los componentes fundamentales de la naturaleza.
Un año después de ese hallazgo, la Academia Sueca lo premió con el Nobel de Física. Para entender la relevancia de las investigaciones de Higgs , vale recordar que en 1993 el ministro de Ciencia británico lanzó un desafío a los físicos de ese país: una botella de champán a quien pudiera explicar, en apenas una carilla, qué es el bosón de Higgs y para qué sirve. Hubo sólo seis ganadores.
En el bosón de Higgs está la clave del origen del Universo: cómo inmediatamente después del Big Bang se formó la materia. La respuesta a uno de los mayores misterios de la física y uno de los descubrimientos de mayor relevancia en el último siglo.
Higgs ideó su teoría mientras caminaba por la cadena montañosa Cairngorms del este de Escocia un fin de semana de 1964. Estaba tan inmerso en sus investigaciones físicas sobre la partícula que, cuando nació su primer hijo, él estaba a kilómetros de distancia en una biblioteca universitaria. Es que vivió buena parte de su vida alejado de la realidad: recién se compró su primera computadora cuando cumplió 80 años y no usaba ni televisor ni celular.
De hecho, el día que se anunció el Nobel, no recibió la llamada de la academia porque no estaba en su casa. Y cuando un antiguo vecino se paró en la calle para saludarlo, su primera respuesta fue un asombrado “¿Qué premio?”.
Una carrera brillante
El titular de la Universidad de Edimburgo, el profesor Sir Peter Mathieson, indicó este martes que el científico «fue un individuo notable, un científico verdaderamente dotado, cuya visión e imaginación han enriquecido nuestro conocimiento del mundo que nos rodea».
Peter Higgs, al recibir el Premio Nobel de Física. Foto: AFP«Su trabajo pionero ha motivado a miles de científicos, y su legado continuará inspirando a muchos más durante generaciones venideras», agregó.
Pero durante más de 20 años, Higgs ni siquiera se habló con su rector en la Universidad de Edimburgo. Sus creencias políticas y actividades gremialistas muchas veces interfirieron con su trabajo, volviéndolo un individuo tan problemático que en su opinión su universidad lo hubiera despedido hace décadas, de no ser por la posibilidad de ganar el Nobel.
Nacido el 29 de mayo de 1929 en Newcastle (noreste de Inglaterra), la infancia de Higgs transcurrió en varios lugares debido al trabajo de su padre, que era ingeniero de sonido de la BBC, y sus problemas de asma, que motivó que su familia se mudara varias veces.
A los 17 años, Higgs accedió al prestigioso colegio City of London, considerado uno de los mejores del país, donde se especializó en matemáticas antes de proseguir sus estudios universitarios en el King’s College de Londres, donde se licenció en Física con las mejores notas para iniciar una brillante carrera, ocupando cargos de catedrático en varias universidades.
El profesor Peter Higgs fue premiado con el Nobel en 2013. Foto: EFEAl asumir en 1960 la cátedra de física teórica en la Universidad de Edimburgo, Higgs desarrolló la idea de que las partículas no tenían masa cuando el universo comenzó, adquiriendo la misma una fracción de segundo después por la interacción de un campo teórico, conocido como el campo de Higgs.
Al científico nunca le agradó el sobrenombre popular para su bosón, “la partícula de Dios”. Sobre su descubrimiento, había dicho antes de ser premiado con el Nobel que no pensó «que iba a ocurrir mientras vivía». Fue en declaraciones a la revista «New Scientist». Allí también reconoció que «a veces es agradable tener razón«.
Pero cuando identificó la crucial partícula, su euforia duró poco, ya que el informe que escribió fue rechazado en su momento. Como quería que fuera publicado, le agregó algunos párrafos para hacerlo más interesante. Aquel fue el artículo en el que identificó explícitamente a la partícula por primera vez. Hizo un buen trabajo ya que el día en que su informe fue entregado para publicarse apareció otro en otra revista, que proponía una teoría casi idéntica a la suya. Pero Higgs había agregado suficiente material nuevo como para que su artículo fuera publicado y la partícula se hiciera conocida con su nombre. De hecho, compartió el Nobel con el coautor del artículo rival, el belga François Englert.
AS