La Justicia de la Argentina fue elegida por un grupo de abogados ucranianos para denunciar un presunto crimen de guerra por parte de Rusia. La víctima, un ciudadano de Ucrania, aseguró haber sido torturado por oficiales rusos. El caso llamó la atención en la esfera nacional ya que es la primera presentación en la Justicia Federal acerca de «torturas» por el conflicto bélico que envuelve a Rusia y Ucrania desde febrero de 2022.
La denuncia fue presentada este lunes ante el Tribunal Federal de Buenos Aires por la ONG «The Reckoning Project», que tiene base en Ucrania. Allí, se indicó que un ciudadano ucraniano fue electrocutado durante su arresto en un centro de detención en una zona ocupada del sur de Ucrania. La tortura la habrían perpetrado agentes rusos.
En su denuncia, el ucraniano acusa a varias personas. A uno que tiene identificado por nombre y apellido, y a dos más a los que identificó por sus «apodos» o «insignias militares». Además, hizo extensiva la denuncia hacia otros soldados rusos por utilizar la electrocución y el encarcelamiento ilegal como formas de tortura a mediados o finales de 2022.
«Me detuvieron en el trabajo y me retuvieron en un centro de detención por 20 días. Durante ese lapso, me torturaron -denunció-. Me aplicaron descargas eléctricas», contó en una entrevista realizada por la agencia de noticias Reuters.
En un departamento ubicado en la Ciudad donde se realizó la entrevista, el ucraniano apuntó que la denuncia fue directamente para «aquellos que dirigían el centro de detención», ubicado en el sur de Ucrania, y para los que «participaron de la tortura con electrocuciones», según precisó. Además, hubo una denuncia a su «superior en el trabajo» a quien acusó de «facilitar su detención y posterior abuso».
«Todo el proceso fue increíblemente doloroso. Varias veces perdí el conocimiento debido a las descargas eléctricas que recibí. Tuve suerte de sobrevivir», contó. Y advirtió que en dicho centro «todavía hay mucha gente de su país allí».
Representante de una ONG junto al denunciante ucraniano salen del Poder Judicial donde realizaron la denuncia contra Rusia. Foto: Reuters Luego de 20 días de detención, interrogatorios y torturas, el ucraniano fue liberado sin cargos y huyó a un territorio no ocupado de Ucrania, según confirmó a la agencia de noticias, Ibrahim Olabi, principal asesor jurídico del caso.
Si bien la denuncia es la primera que se realiza en Argentina, no es un caso nuevo para el mundo. De hecho, coincide con el de otras víctimas de tortura durante la invasión rusa en ese mismo centro que fueron descubiertos por distintas organizaciones internacionales, entre ellas las Naciones Unidas.
En tanto, el Ministerio de Defensa ruso se negó el lunes a hacer comentarios. Desde Moscú se niega haber cometido crímenes de guerra en Ucrania y desestimó órdenes de arresto anteriores por crímenes de guerra de la Corte Penal Internacional. «Es parte de una campaña occidental plantada para desacreditar a Rusia», afirman.
Por qué eligió la Argentina
La denuncia legal presentada este lunes, consta de casi 70 páginas. Y la llevaron a cabo, el ciudadano ucraniano y miembros de la ONG «The Reckoning Project».
En el expediente, se incluye supuestos testimonios de otras personas detenidas en el mismo centro de detención que respaldan las acusaciones, así como conclusiones de expertos de las Naciones Unidas sobre prácticas similares de tortura en lugares, incluido el involucrado.
“Soy uno de muchos. Tantas otras personas que conozco fueron sometidas a cosas aún peores. Quiero contarle al mundo sobre nuestro dolor. Estas prácticas siguen pasando en territorios ucranianos ocupados por Rusia”, denunció el ciudadano de Ucrania.
El equipo legal que representa al hombre denunciante pidió que se ocultaran los detalles en la presentación que podrían identificarlo, la ubicación exacta y el momento de los presuntos eventos, y la identidad de los presuntos perpetradores, citando «las preocupaciones por la seguridad del hombre y de su familia».
“La Constitución de Argentina tiene esta base de jurisdicción para tratar casos internacionales, sin importar el lugar en donde ocurrió, pero también tiene experiencia en los crímenes de tortura y particularmente en electrocución”, aseguró la periodista y activista ucraniana Nataliya Gumenyuk, quien acompañó a la comitiva.
El tribunal argentino ahora tiene que decidir si aceptará la denuncia, lo que potencialmente podría llevar meses. Hasta ese momento, la presentación no se hace pública. Si los fiscales argentinos aceptan la denuncia, será el primer caso sobre presuntos crímenes de guerra rusos en Ucrania presentados fuera de Europa y Estados Unidos.
Después del histórico «Juicio a las Juntas», Argentina se convirtió en uno de los líderes mundiales en «jurisdicción universal».
Al aplicar este principio, los fiscales pueden presentar casos por crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad en otros países incluso si las víctimas y los perpetradores no tienen ningún vínculo con Argentina.
Con información de Reuters
