La Fundación Universitaria de La Plata (FULP), la Asociación de Trabajadores de la UNLP (Atulp) y Asociación Docentes de la UNLP encabezaron la marcha que comenzó en Plaza Italia y que reunió, además, a agrupaciones estudiantiles, enroladas en distintos espacios políticos como La Cámpora, el Frente de Unidad y los Trabajadores y Franja Morada, quienes apuntaron contra las políticas económicas del gobierno del presidente Javier Milei.
«Era necesario poder coincidir los tres gremios de la Universidad y además sumar la mayor cantidad de sectores», señaló a Télam sobre la medida de lucha, Lucas Guidi presidente de la FULP.
En esa línea, se refirió a los costos a los que debe enfrentarse un estudiante, como alquileres por arriba de los 200.000 pesos y el acceso al vale del comedor universitario a 1060 pesos diarios.
Durante la movilización se escuchó el cántico: Universidad de los trabajadores y al que no le gusta se jode, se jode» y además los presentes caminaron con carteles que indicaban «Mili se te ve la casta», «defendemos la educación pública», «las fuerzas de la educación», entre otros.
«Estamos con un plan de lucha con las aulas llenas, construyendo el frente gremial universitario de La Plata con la Federación Universitaria, con ADULP y Atulp para frenar las políticas de ajuste».
Por su parte, Octavio «Tato» Miloni explicó que la movilización de este viernes es «una lucha de unidad por el salario, por las condiciones de trabajo, por los derechos estudiantiles, por el presupuesto universitario y para sostener una universidad amplia, democrática, latinoamericanista, feminista y popular».
«Cada anuncio presidencial tiene como víctimas al pueblo argentino y tiene como beneficiarios a grupos concentrados y monopólicos de la economía», se indicó y se agregó «que hay desprecio por el rol del estado y tiene como foco directo de sus ataques a los trabajadores estatales».
Además, se destacó que «el movimiento estudiantil no escapa a esta situación que padece nuestro pueblo» lo que «obliga a abandonar las aulas por no poder enfrentar los costos de la vida universitaria».
Por último, se llamó a «defender lo que hemos construido: esta universidad que queremos como parte inseparable del país que anhelamos».